El fin de semana pasado fue feriado en Barcelona, entonces no tuvimos clase lunes ni martes. Una amiga y yo decidimos ir a Marruecos para los días que no teníamos clase, y fue una experiencia maravillosa.
Marruecos es muy diferente de todas las ciudades que he visitado durante mi semestre en Barcelona. Para empezar, está en África, que es un continente totalmente diferente de Europa. Segundo, la cultura árabe es muy fuerte en Marrakech, la ciudad donde nos alojábamos durante el fin de semana. Cada día escuchamos las llamadas a oración de las mezquites en la calle y también el estilo de moda para las mujeres es único.
Hicimos mucho durante los días allí, incluyendo un tour del desierto en camellos y un tratamiento de spa tradicional. Desayunamos cada mañana en la terraza encima de nuestro hotel, que se llama riad en árabe. Nunca olvidaré mi experiencia en Marruecos y estoy muy feliz de haber podido visitar la ciudad.