Sensi es un restaurante increíble, no hay palabras para describirlo. La comida es bastante variada, y hay platos típicos italianos y al mismo tiempo hay platos tailandeses. El menú consiste en tapas, porciones grandes y medianas. 

Empecé con una ensalada mixta de queso de Brie y cebollas caramelizadas y croquetas. Otras selecciones para compartir incluyen alcachofas fritas, atún tartar con pan, y una ensalada de queso de cabra. También, había platos españoles como patas bravas, pan con tomate, y paella de marisco. Para mi segundo plato escogí la pasta de trufas con aceite de trufa y parmesano, y fue maravillosa. 

La otra pasta era ravioli de ricotta, espinacas, y tomillo, que me parecía riquísima. Hay porciones grandes de pasta y medias porciones. Normalmente, te recomiendan escoger dos o tres tapas por persona. Yo comí mucho pan entonces te recomendaría pedir tres tapas. 

El único problema con el restaurante fue el servicio. No pedimos mucho y la cena duró unas dos horas. Sin embargo, la comida fue excelente y espero que el mal servicio fuera una práctica inusual. Los precios varían mucho pero la mayoría de las tapas cuestan entre cuatro y seis euros. Las porciones grandes de pasta y paella cuestan más o menos diez euros.

El restaurante está ubicado en Carrer Ample 26 cerca de la parada Jaume I y el horario es de lunes a domingo, de 19h a 0h. Quizás tengas que esperar para sentarte, pero los camareros recomiendan un bar donde puedes tomar algo y esperar y cuando tu mesa está lista los camareros te van a buscar al bar. 

Por lo general, la comida y el ambiente hicieron de este restaurante uno de mis favoritos de Barcelona. Lo recomiendo para cenar con los padres también.